marriasisisi
lunes, 25 de agosto de 2025
VORTEX-GASPAR NOÉ
lunes, 21 de julio de 2025
UNA CASA HECHA DE ASTILLAS- SIMON LERENG
El filme documental cuenta la emotiva historia de cuatro menores separados de sus padres por sentencias judiciales y acogidos temporalmente en un orfanato situado cerca de la frontera. A pesar de sus dramas personales y de tener a la guerra llamando a la puerta, las educadoras del centro hacen todo lo posible por crear un espacio seguro para los niños mientras esperan una resolución judicial que determinará su futuro. Antes de que empezara la invasión rusa a gran escala, muchos niños de las regiones orientales de Ucrania ya sabían lo que era vivir de forma precaria y disfuncional en medio de un conflicto armado. La pobreza, el alcoholismo y las adicciones a las drogas llevaron a muchos padres a descuidar o abandonar a sus hijos.
jueves, 17 de julio de 2025
MANSO .24.11
un par de bichitos corriendo despavoridos mientras me calzaba las zapatillas de madrugada, el perro bebía más que nunca parándose en todas las fuentes de la ciudad... unos hilos negros rodeaban el grifo de la cocina, el perro se despertaba con el pelo empapado en orines...había pequeños excrementos de los insectos en los azulejos del baño, la respiración agitada del animal era constante...
salí del veterinario una tarde de noviembre sin despedirme de nadie porque volvía al trabajo, las lágrimas no me dejaban ver y tropecé dos veces sin llegar a caerme mientras pasaba dos semáforos en rojo. La gente me miraba con extrañeza en el metro y esa misma tarde mientras enseñaba un colchón ví una cucaracha enorme en el suelo, tiré una almohada disimuladamente para espantarla y la clienta no llegó a a verla, en siete años jamás había salido un bicho de la tienda ...
por la mañana me dolía la cabeza y tenía los ojos hinchados de tanto llorar, lo que más me preocupaba era que no podría volver a soñar con animales cuando el perro no estuviera a mi lado.
Al sacar un tetrabrik vi una cría diminuta entre la goma de la puerta, arrastré la nevera y contemplé una nube negra que avanzaba en procesión deslizándose por detrás...
había encontrado el nido ...
martes, 11 de marzo de 2025
TRISTE TIGRE- NEIGE SINNO
Un extraordinario cuento de Antonio Ortuño presenta a un niño narrador en una aventura tragicómica en la que su padre, vendedor de fruta, charlatán y un poco canalla, lo lleva a pasar un fin de semana con unas personas de clase media que tienen una casa de campo. Se siente incómodo entre los demás niños , que lo miran con desprecio, excepto una niña de su edad que es un poco más simpática que los demás y que se queda maravillada cuando él cuenta que ha ganado un premio de escritura en el colegio. Intentando esconderse para evitar una salida en barco por el lago con los niños que se burlan de él, sus padres alcoholizados y su propio padre, que lo averguenza con sus patéticos esfuerzos por parecer uno de ellos. el narrador tropieza con uno de los padres, que está abusando de la niña. El agresor, furioso, lo obliga a desnudarse y azota a los dos niños con cinturones.Ninguno de los otros adultos se da cuenta de nada, vuelven de su paseo en barco medio borrachos y continúan su fin de semana. En el momento de separarse, la niña se dirige al niño:
-Tú escribes - dijo con lentitud y torpeza, como si la lengua se le hubiera quedado inmanejable.
No supe responder.
--Escribe esto un día. Un libro.(...) Que lo lean. Que arranquen las hojas y se las traguen.
pág;49
Cuando era pequeña, un día, mi padrastro me dijo que si yo era tan buena alumna en la escuela era gracias a él. Lo que él me hacía me volvía especial. La lucidez que tenía, esa inteligencia un poco excesiva y desproporcionada para mi edad, se debía a que yo vivía una experiencia fuera de lo común, que me obligaba a sobrepasar los límites.
pág;56
Hace algunos años me quedé atónita cuando vi el nombre de una red de pornografía infantil que acababan de desmantelar: se llamaba damagedforlife.No es el nombre de un grupo de víctimas, sino el de un sitio que los depredadores se pasan entre ellos por internet. Les atrae saber que los actos que están viendo tienen víctimas reales, que quedarán dañadas para siempre.
Damaged, dañado, en francés se dice abimé. Dañado, dañada, rodeados por el abismo.
pág;57
Recuerda algunos detalles sórdidos, una habitación en un sótano, los abusos que tuvieron lugar cuando mi madre trabajaba, que se prolongaron durante mucho tiempo, desde que tenía ocho o nueve años hasta después de la pubertad. E incluso un poco después, cuando por miedo a que me quedara embarazada, practicaba la sodomía. Recuerda que decidí hablar cuando mi hermana pequeña cumplió la misma edad que yo tenía cuando empezaron los abusos, diciéndome que nunca me perdonaría que le hiciera a ella lo que me había hecho a mí.
pág;70
Tengo una vida interior. Una gran vida interior, infinita y secreta, totalmente mía. Recuerdo que cuando era pequeña pensaba que, con lo que estaba viviendo, la cárcel no sería nada, podría pasar años encerrada en una caja y, a pesar de todo, conseguiría vivir en mis pensamientos. Puedo pasar por cualquier situación y aún así, tomarme un momento para mí y pasear por mi mundo propio.
pág;78
Aún no había leído Tigre, tigre, el libro que Margaux Fragroso publicó en 2011, en el que relata como de niña, conoció a un vecino amable y un poco excéntrico, que tenía animales exóticos y le ofrecía toda la atención que no le procuraba su familia;todo ello al tiempo que abusó de ella durante diez años.
pág;92
Bernardo Atxaga narra la historia de un extranjero que se instala en un pueblo y se hace amigo de unos campesinos locales. Un día, mientras los tres están sentados en un muro bajo en una colina que domina una meseta, el forastero habla con los dos aldeanos sobre la peculiar naturaleza de lo que ven debajo, en la llanura que se extiende ante sus ojos . Uno de los dos viejos campesinos le cuenta al narrador que, por muy inteligente que sea, "más listo que un conejo", no puede ver tantas cosas en ese paisaje como las que ve él.
Porque usted solo ve lo que hay.En cambio, yo veo lo que hay y lo que no hay.
Cuando yo veo aquellos árboles, veo a su vez las fiestas que hacíamos en nuestra juventud, Veo a las chicas, a los chicos, a Benito y a mí mismo. Pero no con este aspecto alicaído que ahora tenemos sino con el garbo de nuestros veinte años y luciendo camisas blancas ¿No le parece maravilloso?
Y a ustedes, ¿ les parece maravilloso? Depende. Depende del tipo de cosas invisibles que se vean a través de lo visible.
pág; 116
Deberíamos permanecer en el ámbito del lenguaje, porque el lenguaje nos protege de las lágrimas, de la infamia, de la verguenza de imponer a los demás la imagen de la abyección autobiográfica.
pág, 124
A Claude Ponti lo oí responder a un periodista en un programa de radio que le preguntó si la violencia que había sufrido de niño había dejado alguna huella en su vida.Por supuesto, dijo, con voz suave pero un poco sorprendido de que se le pudiera hacer semejante pregunta, como si no fuera obvio, y contó que, por ejemplo, durante años no pudo correr. El sonido de su respiración cuando corría o se esforzaba le recordaba al ruido que hacía su abuelo cuando estaba encima de él, y se desmayaba.El recuerdo era tan insoportable que se le desconectaba el cerebro.
pág;126
La escritura, porque se vale a la vez de lo visible y lo invisible, ilumina la oscuridad.Bernard Noel
miércoles, 5 de febrero de 2025
MALDENIÑA-LORENA SALAZAR MASSO
La espera ocupa tanto espacio como la tristeza, paraliza como el dolor. Ese dolor- dolor sin nombre.Isa se levanta la blusa para mirarse la barriga:sabe desde hace un tiempo, que a ella también algo se le riega.Se pellizca, se agarra fuerte, quiere arrancarse lo que dicen que le sobra.Nadie sabe que falta al colegio porque una tarde de paseo, mientras intenta disimular el miedo al agua aferrándose con los pies a las piedras de una quebrada, una del salón se acerca y le dice que todos están decepcionados de ella porque no es flaca.Todos, todos los que están al otro lado, pegados de los matorrales, niños y niñas que ahora le parecen figuras grises de dientes largos. Las mira y, luego, por primera vez, se mira la barriga, se hace consciente de que tiene un cuerpo, cuerpo malo. Isa queda congelada,¿cómo cargar el cuerpo que acaban de entregarle? ¿Puede quedarse allí sola y ahogar el cuerpo malo?pág,45
Isa junta el polvo de la acera del Hotel con el de la cantina y Vargas lo recoge.Desde el frente Hija Cristina los mira hace un rato. Todas las mañanas, mientras la gente barre,ella cuenta las casas del pueblo, pues tiene un sueño recurrente:casas enteras desaparecen, alguien las arranca y las esconde.Teme que algún día desaparezca la suya, con la prima y ella dentro. Ya todos se saben el cuento del sueño, por eso Vargas no le pregunta qué hace por ahí tan temprano, sino que le da los buenos días. Hija Cristina no responde, se queda mirando a Isa, luego habla:
-Tengo los ojos brutos.
Al decirlo, Isa se frota los ojos y después se agarra la barriga , se pone de cuclillas mirando el suelo, resopla. Luego mira al cielo sin sol.Hija Cristina se asoma sobre ella como si fuera una taza de chocolate:da un par de vueltas alrededor de ella, la huele, busca detrás de las orejas, se asoma sobre sus ojos y allí se queda un rato.
Luego dice:Tiene maldeniña.pág, 52
Cuando Papá entra a la casa, ella camina en cuclillas y se asoma por una ventana. Se ve reflejada en ella, como si estuviera dentro y fuera a la vez, dos Isa , una con Papá, la del futuro, y ella, la que todavía espera. Entre una cortina logra ver una salita, la cocina y un cuarto: el de Papá e Isa. Pasa las manos por los materiales y herramientas con las que él ha estado trabajando en la casa y entiende sus desapariciones, entiende todo. Papá se sienta en un sofá con un vaso de agua. Isa regresa a los pastizales, ahora camina rápido y no parece cansarse, sonríe; por un momento el dolor de barriga desaparece y hasta siente que si se lanzara de una montaña podría volar.pág 81
miércoles, 7 de agosto de 2024
EL COLIBRÍ--SANDRO VERONESI
Una vez dijo una cosa que a Marco le pareció muy reveladora y lo ayudó a comprender la decisión de su hija:para enhebrar una aguja, en Occidente dirigimos el hilo de nosotros hacia fuera, mientras que en Japón lo hacen al revés, dirigen el hilo de fuera hacia sí. En esto estaba toda la diferencia, dijo el Migaja;en Occidente las cosas se hacían de dentro afuera, y en Japón, de fuera adentro.pág160
Según declaraciones de un miembro de su personal al periódico de moda Notorius, Prince no permitía que sus empleados lo miraran." Vi que despedía a uno porque lo miró", dice el empleado, que guarda el anonimato ."Este por qué me mira? Decidle que se vaya". En Estados Unidos tienen una expresión para designar esta forma de provocación:eye- contact. A aquel desgraciado le costó el trabajo, pero probad a mirar al que tenéis al lado en cualquier local de mala fama del Bronx."Qué hiciste para acabar así?"
"Eye - contact"La filósofa francesa Baldine Saint Girons,dice que el acto estético consiste en entrometerse;mirar es tocar a distancia;las miradas son cuerpo.Son todo lo contrario de pasivas.
Todos los días recibimos cientos de miradas y a nuestra vez miramos a cientos de personas.La mayoría de las veces no nos damos cuenta de que nos miran ni los demás se dan cuenta de que los miramos.Por eso no ocurre nada y esas miradas no tienen consecuencias.
De pasividad, nada.
"Soy lo que veo", ha dicho Alexandre Hollan.El bombardero estadounidense Thomas Ferebee pidió a sus ojos que le indicaran el momento en que debían soltar la bomba sobre Hiroshima desde el avión Enola Gay, y esos mismo ojos vieron, unos momentos después, el hongo terrible que la explosión produjo. Eso significa que se entrometió. Hoy los estadounidenses usan bombarderos sin tripulación, llamados drones, que lanzan las bombas por orden del algoritmo que los gobierna. Sin una mirada directa nadie se entromete y nadie tiene la culpa.pág 234
jueves, 25 de julio de 2024
ALEJANDRA KAMIYA-LOS ÁRBOLES CAIDOS TAMBIEN SON EL BOSQUE
Hay muchas cosas que no tienen nombre.
Ciertos momentos del día, como aquel rojizo entre la tarde plena de luz y la noche, ciertos gestos, ciertos ritmos, algunas partes del cuerpo, algunos colores como verdes que no son ni agua ni musgo.
Eso que no tiene nombre, existe.
Dejamos de nombrar a mi hermano el mismo día en que se fue de casa, cuando yo tenía ocho años. Y como si de un manotazo las hubiese arrastrado con él al olvido, algunas de sus cosas perdieron también el nombre.
Sé que los esquimales, de tanto ver la nieve, pueden distinguir y nombrar más de diez tipos de blanco. Yo aprendí a distinguir muchas formas diferentes de silencio, pero a diferencia de los esquimales, no los nombré. pág88
El soldado Sato cava y a veces un recuerdo se cruza sin detenerse ni apurarse, como si se deslizara.Él solo lo mira. Una nube que pasa.
Sus guetta de niño. Recuerda sus pies flacos, abanicos de huesos de pájaro. Los recuerda en la tierra, en los arrozales, en la montaña , en el barro.Su madre encorvada lavando. Había algo en esa posición que lo entristecía. Los hombros adelantados, como si tuvieran que proteger lo que late dentro. Un cuerpo con forma de jaula. pág192
Debajo del párpado el ojo sigue abierto.César Fernández Moreno
Entre a casa y me senté.Cuando mi cartera se apoyó en el sillón, la correa se deslizó por mi hombro, y cayó lentamente y en silencio sobre el fondo azul de los almohadones. No sé cuanto tiempo estuve así. Fue como estar sentada a la orilla de un río .pág278





