lunes, 27 de enero de 2014

ELEGÍAS DE DUINO(Rilke)

¿Pero dime, quiènes son ellos, esos vagabundos, un poco más fugaces aún que nosotros, a los que desde muy pronto, de manera imperiosa, retuerce como a ropa--para quién por amor a quién--una voluntad nunca satisfecha?
De un modo extraño los retuerce, los entrelaza, dobla y balancea, los lanza y los recoge; como desde un aire más engrasado, más resbaladizo, caen y se posan sobre la raída alfombra, adelgazada por su brincar eterno, una alfombra perdida en medio del universo, tendida como un esparadrapo, como si el cielo del suburbio ahí hubiese causado daño a la tierra.

Para la señora Herta Koning.

jueves, 16 de enero de 2014

TRECE PUERTAS (Abel Valenzuela)

Nacido en Sevillona del mar, en 1977,muerto en Barcilla la Nueva,2001.Ser humano.

Fotografía: Vari Camarés



Compostela cuando no eres tú quien Santiago


No puedes estar en Santiago y pensar que el hundimiento de tu barco ha tenido un motivo y que estará para escucharte cuando vuelvas del naufragio. Porque no estará, o tú te habrás ido.
No tiene sentido hablar de tomar aviones. ¿ Qué perdí con esa muerte, que fue lo que consideré tan valioso que ahora no me hunde, con todo y aún estar vivo?

















domingo, 5 de enero de 2014

MARGUERITE YOURCENAR(Fuegos)

"Nunca seré vencida. Sólo a fuerza de vencer.Puesto que cada una de las trampas que sorteo me encierran en el amor, que acabará por ser mi tumba,terminaré mi vida en un calabozo de victorias. Sólo la derrota encuentra llaves y abre puertas.
La muerte,para alcanzar al fugitivo, se ve obligada a moverse,a perder esa fijeza que nos hace reconocer en ella al  duro contrario de la vida.
Nos da la muerte del cisne golpeado en pleno vuelo;la de Aquiles, agarrado por los cabellos por no se sabe qué Razón sombría.
 Como en el caso de la mujer asfixiada en el vestíbulo de su casa de Pompeya,la muerte no hace sino prolongar en el otro mundo los corredores de la huida.
 Mi muerte, la mía, será de piedra. Conozco las pasarelas, los puentes giratorios, todas las zapas de la Fatalidad. No puedo perderme. La muerte para acabar conmigo, tendrá que contar con mi complicidad."pág,31